Receta de Solomillo de cerdo con salsa de cerezas y vino tinto

Descripción

Si buscas una receta deliciosa con sabores contrastantes, esta es la ideal. El solomillo de cerdo es un corte tierno y jugoso que se complementa perfectamente con la salsa agridulce de cerezas y vino tinto. Además, es una receta fácil de preparar y perfecta para impresionar a tus invitados.

Ingredientes

• 1 solomillo de cerdo
• 1 taza de cerezas frescas (sin hueso)
• 1/2 taza de vino tinto
• 4 cucharadas de miel
• 2 cucharadas de vinagre balsámico
• 2 dientes de ajo picados
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• Sal y pimienta al gusto

Preparación

Paso 1: Preparación del solomillo

Comenzamos por el solomillo de cerdo. Retira cualquier exceso de grasa y corta en cuatro porciones. A continuación, sazona con sal y pimienta al gusto.

Paso 2: Asado del solomillo

En una sartén grande y profunda, agrega dos cucharadas de aceite de oliva y calienta a fuego medio-alto. Una vez caliente, añade el solomillo y cocina durante unos 4-5 minutos por cada lado, o hasta que se dore externamente y alcance una temperatura interna de 63°C.

Paso 3: Preparación de la salsa

Mientras se cocina el solomillo, aprovecha el tiempo para preparar la salsa de cerezas y vino tinto. En una olla pequeña, agrega las cerezas, el vino tinto, la miel, el vinagre balsámico y el ajo. Revuelve bien y lleva la olla a ebullición. Reduce el fuego y deja cocinar a fuego lento durante unos 10 minutos, o hasta que se espese y se haya formado una salsa homogénea.

Paso 4: Finalización

Una vez que el solomillo esté cocido, retira de la sartén y deja reposar durante unos minutos antes de servir. Para servir, coloca una porción de solomillo en el plato y agrega una cucharada generosa de la salsa de cerezas por encima. Puedes acompañar con una ensalada fresca y alguna guarnición como arroz, puré de patatas o verduras asadas.

Conclusión

Este solomillo de cerdo con salsa de cerezas y vino tinto es una receta fácil y deliciosa que te dejará como un chef profesional. Lo mejor de todo es que puedes personalizar la salsa ajustando la cantidad de miel o vinagre balsámico para obtener el equilibrio de sabores perfecto. Sirve caliente y disfruta de una comida o cena gourmet en casa.