Descripción

El queso de cabra a la plancha con agridulce de trompeta amarilla Micopal es una receta deliciosa y sofisticada, perfecta para una comida gourmet en la que quieres impresionar a tus invitados. La combinación del sabor suave y cremoso del queso de cabra con la acidez dulce del agridulce de trompeta amarilla Micopal es simplemente espectacular.

Puedes servir este plato como aperitivo o bien como plato principal acompañado de una ensalada fresca. ¡Manos a la obra!

Ingredientes

• 4 rodajas de queso de cabra de unos 2 cm de grosor
• 1 taza de trompeta amarilla Micopal cortada en trozos pequeños
• 1/2 taza de vinagre balsámico
• 1/2 taza de azúcar moreno
• 2 cucharadas de aceite de oliva
• Sal y pimienta al gusto

Preparación

1. Preparar el agridulce de trompeta amarilla Micopal

En una sartén, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade la trompeta amarilla Micopal y saltéala durante unos 5 minutos o hasta que esté dorada. Agrega el vinagre balsámico y el azúcar moreno y cocina a fuego lento durante unos 15-20 minutos hasta que la mezcla se haya reducido y tenga una consistencia espesa similar a la de un jarabe. Añade sal y pimienta al gusto y remueve bien. Deja enfriar antes de servir.

2. Preparar el queso de cabra a la plancha

Calienta una sartén a fuego medio-alto y añade una cucharada de aceite de oliva. Coloca las rodajas de queso de cabra en la sartén y cocínalas durante unos 2 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas. Retira del fuego y coloca las rodajas de queso de cabra en un plato.

3. Montar el plato

Coloca una rodaja de queso de cabra en un plato y cúbrela con una generosa cucharada de agridulce de trompeta amarilla Micopal. Coloca otra rodaja de queso de cabra encima y vuelve a cubrir con más agridulce. Repite el proceso hasta que hayas utilizado todas las rodajas de queso de cabra.

¡Y listo! Tu queso de cabra a la plancha con agridulce de trompeta amarilla Micopal está preparado para ser disfrutado.

Nota: Si quieres darle un toque más sofisticado a este plato, puedes añadir una cama de espinacas frescas en la base del plato antes de colocar las rodajas de queso de cabra. También puedes decorar con una hojita de menta fresca o una pizca de ralladura de limón.