Croquetas de espinacas Crujientes y cremosas
Croquetas de espinacas crujientes y cremosas
Estas croquetas son una deliciosa opción vegetariana para cualquier ocasión. Están llenas de sabor y textura crujiente por fuera, pero suaves y cremosas por dentro. ¡Seguro que nadie se dará cuenta de que no tienen carne!
Ingredientes
- 500g de espinacas frescas, sin tallo
- 1 cebolla pequeña, finamente picada
- 2 dientes de ajo, finamente picados
- 50g de mantequilla
- 50g de harina
- 500 ml de leche entera
- 50g de queso parmesano, rallado
- 50g de pan rallado
- 2 huevos, batidos
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra recién molida
Preparación
Paso 1: Cocinar las espinacas
Limpia y corta las espinacas en trozos pequeños. Cocínalas en una sartén grande a fuego medio con un poco de aceite de oliva, sal y pimienta hasta que se hayan reducido de volumen y estén tiernas. Escúrrelas bien.
Paso 2: Hacer la mezcla de la croqueta
En otra sartén, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo picados y saltea hasta que estén dorados. Agrega la harina y revuelve continuamente durante 2-3 minutos hasta que la mezcla se haya espesado. Agrega la leche poco a poco mientras sigues revolviendo para evitar grumos. Sigue cocinando la mezcla hasta que espese y obtenga una textura suave.
Paso 3: Agregar el queso y las espinacas
Agrega el queso parmesano rallado a la mezcla y revuelve hasta que se haya derretido y mezclado bien. Añade las espinacas cocidas y revuelve para combinar todo. Sigue cocinando la mezcla por otros 2-3 minutos.
Paso 4: Dejar enfriar la mezcla
Vierte la mezcla en un plato y deja que se enfríe a temperatura ambiente. Luego, refrigera la mezcla en el refrigerador durante al menos 30 minutos.
Paso 5: Formar las croquetas
Forma las croquetas con la mezcla enfriada, usando tus manos para darles forma. Coloca las croquetas en una bandeja y ponlas en el congelador durante unos 10 minutos para que se endurezcan un poco.
Paso 6: Empanizar las croquetas
Bate los huevos en un plato y coloca el pan rallado en otro plato. Saca las croquetas del congelador y pásalas primero por el huevo batido y luego por el pan rallado, asegurándote de cubrir completamente cada croqueta por todos lados.
Paso 7: Freír las croquetas
Calienta una buena cantidad de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio. Fríe las croquetas hasta que estén doradas por ambos lados, aproximadamente 2-3 minutos por cada lado. Escúrrelas en papel absorbente para quitar el exceso de aceite.
Paso 8: ¡Disfruta!
Sirve las croquetas caliente y disfruta de su crujiente textura y cremosa mezcla de espinacas y queso. Son ideales como aperitivo o como acompañamiento para cualquier comida.